Orfeo, Orfeo

Bueno, para empezar, e ignorando un poco el título:
Woooooooooooooooooooooooooooooooo!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Tengo mi compu de vuelta, jejeje. Bueno, estoy seguro de que había muchas cosas importantes y altamente trascendentales que quería escribir en mi blog mientras no podía (sí, como no ¬¬), pero ahora que lo tengo no se me ocurre nada, jejejeje (qué raro¬¬).
Bueno, el hecho es que he empezado a leer Niebla de Unamuno, y créanme cuando les digo que ese libro es más del 50% debralles del que parece ser el personaje principal y que realmente es medio... mmmm... no sé... especial, ya que de toda y cada una de las cosas que le pasan hace un debralle que es posible expresar en palabras y para ello le habla, o piensa en, su perro que se llama Orfeo.
Me puse a pensar en que realmente todo el mundo tiene capacidad de generar ideas y pensamientos muy profundos de casi cualquier situación que le ocurra en su vida. Sin embargo es muy difícil, o simplemente  no se nos da la gana, expresarlos. Por lo cual creo que sería bueno que todos tuviéramos algo parecido a un Orfeo, alguien o algo que nos escuchara sin interrumpir, sin creer que nuestras ideas son absurdas, banales o simplemente no le interesan, alguien que nos inspirara suficiente confianza para hablar de todo eso...
De hecho el otro día estaba de nuevo pensando sobre la finalidad del ser humano y de todo lo que habita este planeta, ¿Seremos algo predeterminado,  un simple accidente?¿Qué son las emociones y cuál es su finalidad?¿Qué es la felicidad, el miedo, la dicha, la desgracia, el hambre, la sed, la satisfacción, el deseo, el placer y por qué existen?...
Pueden o no creerlo, pueden decir: Ah, qué estúpido ¿A vaso no tiene nada mejor sobre lo que hablar?
Pero la realidad es que quiera o no esas preguntas siempre vuelven como un mal crónico una y otra vez en los momentos en los que me pongo a pensar, Por alguna u otra razón siempre llegó a lo mismo y no encuentro las respuestas... y no espero que ustedes las tengan, simplemente quiero compartir esto con alguien más, que sepan lo que pienso y... pues bueno... no sé... pero... ¿Por qué la necesidad de compartir lo que pensamos y creemos?
Invariablemente una pregunta lleva a otra.